Lewis Mumford
Mumford sostiene que el excesivo énfasis que el hombre ha dado a la técnica ha contribuido a la despersonalización y la vacuidad de gran parte de la existencia en el siglo XX, y como consecuencia de ello hace un vigoroso llamamiento a favor de un respeto renovado por los impulsos y los logros artísticos, insistiendo en que el desarrollo tecnológico tome al ser humano como medida y la humanidad saque así el máximo partido de sus "espléndidas potencialidades y promesas" invirtiendo el rumbo de su progreso hacia la anomia y la destrucción.