JEFFERS, OLIVER
Alfredo tiene un alce: Marcel. Es cierto que Marcel no siempre obedece las reglas para ser una buena mascota, pero cumple las más importantes. Después de todo, es un buen amigo; o al menos eso parece, hasta el día en que una anciana lo reconoce como suyo: u00a1es Rodrigo! Alfredo vuelve a casa, solo y molesto: u00a1su mejor amigo lo ha abandonado, se ha ido con su legítima dueña! Pero, u00bfrealmente los amigos nos pertenecen? Un alce de muchos nombres nos enseña la respuesta en esta divertida historia.