DANIELA PRADO
En la repetición de rituales sin sentido: mirarse al espejo, trabajar, preparar la comida, conocer el amor, rezar, ser amable, lidiar con personas... la pereza inmensa de representar el yo que: se repite, se digiere dentro, se regurgita y se mastica, como un chicle frío y duro.
Cuánto dolor existe en coser la identidad y representarla, cueste lo que cueste, hasta el hastío; siendo uno un animal que no entiende, pero, a morir, lo intenta.
Daniela Prado