RILKE, RAINER MARÍA
En esta antología se mezclan, así como en toda su obra, visiones diversas de lo sagrado. Pero el elemento fundamental es que en ellas se repite un motivo permanente, un movimiento, si se quiere conceptual, pero sobre todo expresivo, estético, de naturaleza sensible. En los poemas de esta selección hace presencia una especie de dialéctica de la profanación... Rilke se compromete con la grandeza de su objeto de referencia, asume la inconmensurabilidad del Dios del Antiguo Testamento, su encarnación radical en el Nuevo, la idea de un Dios que se mueve como eternidad y totalidad del tiempo o también la sacralidad del dios órfico; admite lo sagrado en todas sus formas, pues sólo así puede conseguir el efecto lírico